Sánchez
fue agricultor, arriero, pintor, mago, equilibrista,
maromero, Presidente de la Junta Comunal de San Rafael,
titiritero, payaso, juez, arquitecto, escultor,
ingeniero empírico y narrador, entre otras cosas.
Participó
en la reconstrucción de la iglesia de San Rafael de
Mucuchíes, bajo la dirección del sacerdote Ángel Sánchez
Alcántara y puso en funcionamiento una turbina para que
su pueblo tuviese electricidad.
Además
de arquitecto autodidacta fue un creativo tejedor de
ruanas, cobijas y sombreros, un excepcional escultor y un
audaz diseñador de muebles que rompían con parámetros
tradicionales de la simetría y la comodidad.
Los
que lo conocieron, dicen que fue un hombre que emanaba
alegría y paz interior. A través de su vida expresó las
posibilidades de desarrollo del ser humano, más allá de
las limitaciones ajenas a su propio ser. Juan Félix
Sánchez ofreció usar el terreno de su propiedad y se hizo
miembro fundador de Medatia, en un afán de dejar un
último legado para su pueblo.
En
su finca de El Potrero desarrolló todo su talento
artístico. Fue allí en las montañas dónde floreció
su creatividad y dónde logró gran inspiración.
Construyó la plaza de su museo en las montañas páramo
adentro. En este mismo lugar edificó una capilla en honor
a la Virgen de Coromoto, hoy este lugar es de gran atractivo
turístico. Como escultor fue reconocido como un verdadero
artesano, su primer trabajo titulado Cristo - Virgen -
Magdalena, grabado en mármol fue catalogado como una
gran obra.
La Capilla del Filo de El Tisure, la Capilla de San Rafael de Mucuchíes, la casa de El Potrero, El Bohío y demás capillas pequeñas, sus murales (ya desaparecidos), sus tejidos hechos a telar de tres pedales, las tallas de El Calvario, los santos y las vírgenes, y su relación con los materiales que utilizó dan testimonio de su estética teocéntrica orientada a la naturaleza.
El 18 de abril de 1.997 murió en el Hospital Universitario de Los Andes a causa de una deficiencia cardiaca. Su legado sigue presente tanto en los Andes Venezolanos, como en el resto del país.
La Capilla del Filo de El Tisure, la Capilla de San Rafael de Mucuchíes, la casa de El Potrero, El Bohío y demás capillas pequeñas, sus murales (ya desaparecidos), sus tejidos hechos a telar de tres pedales, las tallas de El Calvario, los santos y las vírgenes, y su relación con los materiales que utilizó dan testimonio de su estética teocéntrica orientada a la naturaleza.
El 18 de abril de 1.997 murió en el Hospital Universitario de Los Andes a causa de una deficiencia cardiaca. Su legado sigue presente tanto en los Andes Venezolanos, como en el resto del país.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario